Después de varios meses de celibato forzado por la situación económica, finalmente decidí parar de sufrir. Rompí la alcancía y salí a la búsqueda de un poco de cariño.
Me subí a mi Zanellita Tricargo y puse rumbo sur. Al venerable Magic Kingdom. El que solía ser el Disney World de los gateros del proletariado.
Dejé la Zanellita al cuidado del fiel Diógenes. Y subí las míticas escaleras. Atravesé las puertas enrejadas y me presentaron un interesante plantel de predispuestas señoritas. Apenas ví aparecer a mí futura esposa dije: "¡Paso con Priscila!". Más detalles del plantel en el Auto MP.
Descripción de la señorita
Priscila es argentina, 28 añitos, morocha, linda de cara. Muy linda cola, bien alimentada. Debajo de la campera hoy tenía puesto un corpiño de encaje color negro que le queda bárbaro.
Comencé degustando su deliciosa vagina depilada de impecable higiene. Un placer de chupetear.
Ni bien se endureció mi herramienta me coloqué el preservativo. Y comencé con la penetración en misionero.
En un momento hice un descanso para recuperar fuerzas. Y volver a saborear las mieles de esa preciosa conchita.
Para luego reanudar el mete y saca en misionero. Estaba tan bueno ese cuerpo a cuerpo que no demoró mucho en ocurrir lo inevitable. Descargué todo mi amor en el preservativo. Al grito de: "¡Viva Perón!". Es que en ese momento de tanta pasión no me pude contener.
El lugar
El venerable Magic Kingdom de Wilde. El Disney World para los gateros de la alta oligarquía.
Cuenta con salón para degustar bebidas espirituosas. Con rockola, luces de neon y aire acondicionado. Hoy estaban sentados Elon Musk, Mark Zuckerberg y Jeff Bezos. Discutiendo la ingeniería financiera (cuánto ponía cada uno) para ver si podían llegar a juntar entre todos las 20 lucardas del pase corto.
A mí me tocó una de las habitaciones que dan al frente. La que sigue al baño. Cuenta con cama matrimonial, colchón en buen estado y mesita de luz. Con puerta ventana hacia el balcón. Con vista a la avenida. Con la estructura tubular montada sobre la pared. Como para poder colgar el smoking. Todo un lujo.
Aranceles
Cuando Priscila me comentó que habían aumentado las tarifas pasé momentos de zozobra. Se me aflojaron las piernas. Me desvanecí. Casi tienen que llamar al SAME.
Cuando pude recuperar la compostura tuve que acudir al "fondo de emergencia". De la suela de las alpargatas saqué otro billete de $10.000 para poder saldar la deuda.
Ahora los aranceles son de $20.000 los veinte minutos, $40.000 los cuarenta y $60.000 la hora. La famosa tarifa plana: unos $1000 por cada minuto de amor.
No hubo mención de recargo por preservativo. Pero usamos el que yo llevé.
Horarios
Priscila trabaja en el horario nocturno. De martes a sábados de 19 a 6. El Templo funciona 24x7.
Conclusión
Me encanta Priscila: muy buen servicio y muy buena onda. Si algún día acierto la quiniela clandestina pienso volver.
Me subí a mi Zanellita Tricargo y puse rumbo sur. Al venerable Magic Kingdom. El que solía ser el Disney World de los gateros del proletariado.
Dejé la Zanellita al cuidado del fiel Diógenes. Y subí las míticas escaleras. Atravesé las puertas enrejadas y me presentaron un interesante plantel de predispuestas señoritas. Apenas ví aparecer a mí futura esposa dije: "¡Paso con Priscila!". Más detalles del plantel en el Auto MP.
Descripción de la señorita
Priscila es argentina, 28 añitos, morocha, linda de cara. Muy linda cola, bien alimentada. Debajo de la campera hoy tenía puesto un corpiño de encaje color negro que le queda bárbaro.
Comencé degustando su deliciosa vagina depilada de impecable higiene. Un placer de chupetear.
Ni bien se endureció mi herramienta me coloqué el preservativo. Y comencé con la penetración en misionero.
En un momento hice un descanso para recuperar fuerzas. Y volver a saborear las mieles de esa preciosa conchita.
Para luego reanudar el mete y saca en misionero. Estaba tan bueno ese cuerpo a cuerpo que no demoró mucho en ocurrir lo inevitable. Descargué todo mi amor en el preservativo. Al grito de: "¡Viva Perón!". Es que en ese momento de tanta pasión no me pude contener.
El lugar
El venerable Magic Kingdom de Wilde. El Disney World para los gateros de la alta oligarquía.
Cuenta con salón para degustar bebidas espirituosas. Con rockola, luces de neon y aire acondicionado. Hoy estaban sentados Elon Musk, Mark Zuckerberg y Jeff Bezos. Discutiendo la ingeniería financiera (cuánto ponía cada uno) para ver si podían llegar a juntar entre todos las 20 lucardas del pase corto.
A mí me tocó una de las habitaciones que dan al frente. La que sigue al baño. Cuenta con cama matrimonial, colchón en buen estado y mesita de luz. Con puerta ventana hacia el balcón. Con vista a la avenida. Con la estructura tubular montada sobre la pared. Como para poder colgar el smoking. Todo un lujo.
Aranceles
Cuando Priscila me comentó que habían aumentado las tarifas pasé momentos de zozobra. Se me aflojaron las piernas. Me desvanecí. Casi tienen que llamar al SAME.
Cuando pude recuperar la compostura tuve que acudir al "fondo de emergencia". De la suela de las alpargatas saqué otro billete de $10.000 para poder saldar la deuda.
Ahora los aranceles son de $20.000 los veinte minutos, $40.000 los cuarenta y $60.000 la hora. La famosa tarifa plana: unos $1000 por cada minuto de amor.
No hubo mención de recargo por preservativo. Pero usamos el que yo llevé.
Horarios
Priscila trabaja en el horario nocturno. De martes a sábados de 19 a 6. El Templo funciona 24x7.
Conclusión
Me encanta Priscila: muy buen servicio y muy buena onda. Si algún día acierto la quiniela clandestina pienso volver.