eXPeriencia Dania

Bueno, que decir: excelente la atención de Dania. Es una fija. Para empezar, se presentó en la habitación recién bañada, con un trajecito de porrista con pollera mini plisada, medias de red y una camiseta que, con su carita sonriente me hizo acordar a un personaje de anime japonés. Muy buena la dinámica de los disfraces.
De entrada no se desvistió, si no que empezamos con unos besitos y franeleo por la cola y la cintura, mientras me acariciaba el miembro ya parado bajo el pantalón. Voló mí ropa y la camisita de ella, mientras se arrodillaba en la cama, se soltó el corpiño y salieron esas dos hermosas tetas, de pezones rosados que tiene. Son hechas, pero muy bien hechas: blanditas al tacto, un manjar. Me quedé chupandoselas mientras me pajeaba hasta que se agachó y empezó un mamadon de pija épico. Sin forro, hasta el fondo, con lamidas y acariciando los huevos. Le pedí un 69: cero olores, conchita rosada y suave un manjar. Después encapuchó, se ensalivó la conchita con la mano y empezamos con un patitas al hombro divino. Gemía despacito, muy rico la verdad. Después me montó ella, de frente, mientras le comia las tetas hasta que no pude más, la di vuelta, y le entre a dar en cuatro, agarrándola de las tetas con una explosión de felicidad al descargar todo. Muy buen polvo.
Destaco el trato, lo rico que olía su cuerpo y lo suave de su piel.
Me fui ahí nomás, muy satisfecho por el servicio.
La recomiendo a la petisa, muy bonita y un cuerpo hermoso, lleno de curvas. El lugar limpio y ordenado, me ofreció una bebida pero no quise.